La gracia de hacer vinos en Chile es que está todo por hacer. Eso pensó Felipe de Solminihac cuando se fue a plantar a Malleco D.O. y revolucionó la industria con su Chardonnay Sol de Sol, una apuesta arriesgada en los 2000, pero que después de veinte años es ampliamente reconocida. T3rzo es uno de sus más insignes representantes, un ejemplo de cómo esta D.O. ha ido sumando prestigio paso a paso.
T3rzo es un ejemplar nacido de un viñedo plantado en plena Cordillera de Nahuelbuta, eso significa un granito evolucionado y suelos rojos arcillosos. El esfuerzo ha estado liderado por dos crack’s, el destacado enólogo Alejandro Jofré y el viticultor Renán Cansino, quienes han comprendido que acá no es necesario andar arrancando del calor.


De alguna manera, T3rzo tiene una viticultura europea en algún sentido. No es que quieran el calor para vinos sobre maduros. Al contrario, necesitan esa radiación y una ladera cálida para alcanzar a cosechar. Es como si estuvieran en Borgoña. Buscando esa luz que escasea. Sin corregir acidez, muy baja extracción y sin invadir la fruta con taninos rugosos. Un verdadero acto criminal, mucho menos para un Pinor Noir. Para terminar con una madera casi imperceptible. Mitad barrica de tercer uso y mitad estanque de hormigón.
El resultado es un Pinot de pura fruta, fresca y nerviosa de 13° de alcohol con una rica acidez, aromas de frutillas y notas florales tipo violeta con un toque sutil de la madera.
Aunque podría guardarse durante un año tranquilamente, me lo imagino esta cuarentena con una pasta fresca y un queso Grana Padano rallado sobre él.


T3rzo puede encontrarse en cajadeseis.cl a un valor referencial de $12.900 CLP, unos USD $17,8 o $1690 ARS.
Textos: Rodrigo Ortega Aedo
Edición General: Javier Valenzuela